¿Consejos para hacer una maleta? «¡Si eso es facilísimo!», estaréis pensando muchos. Otros diréis: «¡Ay, sí, por favor! Dime el truco del almendruco, que siempre tengo el mismo problema de falta de espacio.»
Y es que hacer una buena maleta es mucho más fácil de lo que todos nos creemos, pero siempre nos empeñamos y cometemos los mismos errores. Y sí, me incluyo, porque da igual las veces que hayas preparado una maleta para irte de vacaciones, las mudanzas que lleves a tus espaldas, las escapadas de cada fin de semana o los viajes de trabajo de años que lleves hechos, volvemos a caer en los mismos errores.
No soy Marie Kondo, ni lo pretendo, porque creo que el orden es cuestión de personalidades, forma de vidas y necesidades de cada uno, pero quiero contaros algunos trucos que yo utilizo al hacer mis maletas, por si os sirven.
CONSEJOS PARA HACER UNA MALETA
Comprueba el tiempo en tu lugar de destino
Es lo primero que siempre hago al empezar a programar unas vacaciones o escapada de fin de semana. Por un lado, porque las actividades que podremos hacer con un tiempo u otro pueden variar muchísimo y por otro lado, ¡por el tema de los zapatos! No es lo mismo cargar en la maleta con un par de chanclas que con un par de botas. Este hecho, quizás nos marca qué tipo de maleta debemos elegir.
Olvídate de los “porsi”
Por si hace frío, por si llueve, por si viene una ola de calor, por si finalmente vamos a la montaña… No, olvídate de los “porsi” porque no puedes llevar material para todos los posibles eventos que puedan surgir en el viaje. Un viaje, bien sea de ocio o de trabajo, está lleno de aventuras, ¡y eso es lo que lo hace emocionante!
Aprovecha los huecos
Y cuando digo que aproveches los huecos, es que aproveches, pero bien, todos los huecos, es decir, que no dejes espacios vacíos sin rellenar. En esos vacíos puedes meter el cargador del móvil, un par de calcetines, un pañuelo de cuello bien dobladito… siempre hay cosas de pequeño tamaño o de no tan pequeño que pueden quedar incluidos en ese espacio.
Bolsos también llenos
Las mujeres solemos llevar en nuestro equipaje otro bolso o mochila para cambiar porque puede conjuntarse mejor con otra ropa, porque es más cómodo o porque vamos a un evento y es el que nos apetece llevar. Entonces debemos plantearnos si, ya que llevas otro bolso dentro de tu maleta, es mejor no llevarlo vacío porque ocupa volumen. Aprovecha ese espacio para llevar dentro, por ejemplo, unas medias o calcetines, alguna joya que lleves para cambiar, la funda de las gafas…
Enrolla los pantalones
Este truco tan sencillo y tan práctico lo aprendí hace años de alguien que por temas familiares prácticamente todos los fines de semana tenía que hacer una maleta. ¡Y qué bien me vino! Los pantalones si, en vez de ponerlos estirados los ponemos enrollados, además de que no se arrugan nada, nos ocupan mucho menos espacio. ¡Pruébalo, que seguro que este truco te va a encantar!
Estira la ropa
Si al hacer la maleta vamos colocando la ropa lo más estirada posible, como os decía anteriormente al enrollar los pantalones, además de que se arruga menos (lo cual está muy bien porque no sabemos si en todos los destinos para los que preparemos maletas tendremos plancha) contamos con la ventaja de que ocuparemos menos volumen en la maleta, y por tanto, nos cabrán más cosas.
Conjuntos de ropa
Ya os he dicho que no podéis llevar “porsi” para todas las situaciones que se puedan presentar durante vuestro viaje y, de hecho, muchos me diréis que ni siquiera tenéis espacio para llevar todo lo que os gustaría y ya sabéis que vais a necesitar. Pues bien, una forma de ahorrar espacio es combinando los conjuntos de ropa, es decir, utiliza tonos de ropa similares para así poder combinarlos todos con los mismos zapatos y otro gran truco es llevar camisetas y pantalones que puedas combinar unos con otros.
Lleva puesto la mayor cantidad de ropa posible
Sí, aunque te cuezas como un pollo. Las compañías de bajo coste nos han enseñado a volar con camiseta, sudadera, abrigo, bufanda, pantalones de pana y botas. Si llevas puesto todo eso, tendrás más espacio en tu maleta para llevar otra camiseta, sudadera, abrigo, bufanda, pantalones de pana y botas. (Truco de experta en vuelos de bajo coste.)
Bolsas al vacío
Si lo que vas a hacer es un viaje largo de varias semanas o incluso meses, me seguirás diciendo que te falta espacio. Pues sí, un buen truco es meter la ropa en bolsas de plástico al vacío. Al reducir el aire, ganas mucho más volumen dentro de tu maleta. Y estas bolsas de plástico son tan sencillas y tan económicas, que puedes encontrarlas fácilmente en muchos establecimientos e incluso en amazon.
Toalla de microfibra
La toalla te será necesaria o no dependiendo del viaje que vayas a realizar. Así que, en caso de que la necesites, olvídate de cargar con una toalla de algodón que te ocupe media maleta. Llévate una sencilla toalla de microfibra, que la puedes enrollar al mismo estilo que los pantalones, e igualmente hará las funciones de secado de tu cuerpo y pelo.
Bolsa para la ropa sucia
Nunca te olvides de incluir en tu maleta una pequeña bolsa de plástico o de tela vacía. Esta luego te servirá para ir metiendo la ropa sucia y/o manchada y a la hora de volver a casa, lo que hará que sea más fácil el deshacer la maleta. Además esto te permitirá que, durante tu viaje, no se mezclen los olores de la ropa limpia con la sucia.
Líquidos
Si vuelas ya sabes las restricciones de los líquidos. Crea una bolsa de aseo para viajes que tengas siempre preparada con botes pequeños de cada una de las cremas y líquidos que necesitas, así, ¡siempre estás listo para salir de viaje en cualquier momento!
Documentación, guías de viaje
¿Papeles? No, por favor, ¡bienvenidos al siglo XXI! Gracias a todos estos adelantos en tecnología, hoy no es necesario ir cargados en nuestra maleta de papeles, ya que en el móvil podemos llevar copia de todos nuestros documentos personales (muy útil), así como las guías y recomendaciones de qué visitar o dónde comer en nuestro destino. ¡Ahorrarás un montón de espacio!
Pero el consejo más importante que puedo darte es: lo que se te olvide ya no se te olvidará nunca para tus próximos viajes, ¿o sí? El ser humano es el único que choca dos veces contra la misma piedra, así que si te pasa esto, ríete y añádelo a tu lista de anécdotas graciosas de tu viaje. Ahora, ya con todo preparado, no me queda más que decirte…¡a disfrutar!