Entre viñedos en La Rioja

Viñedos en La Rioja

¿Conocéis la película “Entre copas”? Está película dirigida por Alexander Payne y ganadora del Óscar al mejor guión adaptado en 2004 nos narra las aventuras de una pareja de amigos que se van de despedida de soltero de uno de ellos por los viñedos de Santa Bárbara, en Estados Unidos. Una comedia divertidísima que os recomiendo. En esta ocasión me traslado también a esos paisajes de viñedos, pero no en Estados Unidos, sino en La Rioja, España.

Esta región cuenta con algo más de 60.000 hectáreas de superficie cultivada, lo que conlleva a que su producción anual de vino sea superior a los 250 millones de litros. Es una región que tradicionalmente, siguiendo el curso del río Ebro, podemos dividir en tres subregiones: La Rioja alta, La Rioja media y La Rioja baja. Y lo que la hace más característicos es que, a pesar de sus escasos 5.000 Km2, se pueden distinguir dos subclimas: un clima mediterráneo en el área del norte, la de valle y en la zona sur, montañosa, un clima más húmedo y continental. Esta unión del clima y los ricos suelos son la consecuencia de que su producción de vino sea de las de más alta calidad del mundo, poseyendo la Denominación de Origen Rioja.

Viñedos en La Rioja
Viñedos en La Rioja

En mi última visita a La Rioja me alojé en Baños de Rioja, un pequeño municipio de 90 habitantes ubicado en La Rioja alta. Un sitio excepcional para recorrer sus viñedos.

Aquí os cuento qué podéis hacer y ver en La Rioja alta en tres días:

  • Día 1

Visita a Ollauri. Este pueblo contiene una de las bodegas que no os podéis perder: Bodega Beronia. Esta bodega es fundada en 1.973 por un grupo de amigos y desde 1.982 es integrada en la Bodega González Byass. Toma su nombre de los berones, un pueblo guerrero celta habitantes de la región de La Rioja del S. III a.C.

Planta de tratamiento de la uva en Bodega Beronia
Planta de tratamiento de la uva en Bodega Beronia

Esta bodega se caracteriza por la selección de su uva de forma que el consumidor reconozca sus vinos con sólo catarlos. Trabajan duramente en la consecución de una igualdad en las añadas para que el sabor del vino sea permanente en el tiempo, por lo que año tras año, el consumidor siga disfrutando al paladar del mismo gusto de vino.

Sala de almacenamiento en barricas de Bodega Beronia
Sala de almacenamiento en barricas de Bodega Beronia

Durante la visita se muestran los distintos pasos del proceso de selección de la uva, producción del vino y posteriormente embotellamiento. Es una visita agradable y amena que termina con la cata de tres tipos de vinos superiores acompañados de una variedad de chacinas de la zona. En total la visita dura entre dos horas y dos horas y media. El precio para la visita premium (es la que os he descrito) es de 30€/ persona. También ofrecen visitas con cata de otros vinos más asequibles por precios inferiores.

Sala de almacenamiento en botellas en Bodega Beronia
Sala de almacenamiento en botellas en Bodega Beronia

Y después de deleitarnos el paladar hay que llenar el estómago. Briones es un municipio espectacular de España, ubicado sobre un cerro de 80 metros de altura, su casco histórico te hace desplazarte a otra época en el tiempo.  Su Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción fue declarada Bien de Interés Cultural. No os podéis perder tampoco la visita al Museo Vivanco de la Cultura del Vino y el Museo etnográfico.

Vistas desde Briones a los viñedos riojanos
Vistas desde Briones a los viñedos riojanos

Laguardia, aunque geográficamente este municipio pertenece a la provincia de Álava (País Vasco), recorrer sus empinadas, estrechas y empedradas calles bien merecen una parada en el camino. Se encuentra incluido dentro de los pueblos más bonitos de España

Puerta de entrada a Laguardia
Puerta de entrada a Laguardia

Además de la belleza, este pueblo también es conocido por la calidad de sus uvas y la producción de vinos. La visita a una bodega subterránea, conocido como bodega cueva, es un imprescindible. Yo hice la visita a una bodega pequeña y familiar, Bodega Carlos San Pedro Pérez de Viñaspre. Es una visita que dura unos 45 minutos y el precio es de 5€. Lo particular de este tipo de bodegas es que el vino madura en cubetas subterráneas, lo que le dota de las condiciones necesarias de humedad y escasa luz. Esta visita finaliza también con una cata, pero en esta ocasión y a diferencia de la de por la mañana, la cata se hace directamente del vino que se encuentra en las cubetas y aún no embotellado. Incluso para los no expertos en vino, como yo, podrás notar la diferencia del sabor, incluso te parecerá que el vino es súper fuerte y amargo, pero tras varias limpiezas bucales con el vino – el guía te enseña como acostumbrar al paladar-  te darás cuenta que ya no es tan fuerte como te podría parecer al principio.

Bodega cueva en Laguardia
Bodega cueva en Laguardia
  • Día 2

Haro es el municipio por excelencia del vino en La Rioja. Esto se debe a que las vías del tren la atraviesan y en torno a ella se creó toda una zona de bodegas conocido como el Barrio de la Estación de Haro. En este día visité la bodega de Gómez Cruzado. Esta bodega, fundada por un mejicano en 1.886, aún continúa en funcionamiento siendo su mercado principal la exportación del vino. Cuando realicé la visita a esta bodega, pensando que encontraría características similares a las del día anterior, me llevé una gran sorpresa. Para esta bodega, su finalidad principal es conseguir uvas de buena calidad que permita hacer un vino de excelencia. No les importa si el sabor que se consigue es diferente al de la añada anterior, sólo quieren que el consumidor que disfruta de su vino sepa que es un vino de calidad. Esto implica que la producción que realizan sea bastante inferior a la que realizan otras bodegas más grandes como Beronia. Esta visita también concluye con una cata. En mi caso, también realicé la cata Premium, que por 40€ incluye una selección de cinco vinos, blancos y tintos, acompañados de jamón y queso. La reserva a esta cata estaba incluida en el alojamiento.

Visita a bodega Gómez Cruzado
Visita a bodega Gómez Cruzado

Vitoria, ya sé que no pertenece a La Rioja, pero los escasos 50 Km que la separan de Haro ya merecían que me acercara a conocerla. Era una ciudad en mi lista de sitios pendientes desde hacía años y no podía perderme la oportunidad de visitarla. Aunque hacía un día gris, creo que es lo habitual en esta ciudad, no dejaba de destacar su belleza. En el año 2.012 fue galardonada con el Premio Capital Verde Europea. No podéis dejar de dar un paseo por la plaza de la Virgen Blanca, la catedral de Santa María (yo no pude visitarla ya que estaba de obra, por lo que tengo una excusa para volver), y sentaros a deleitar la gastronomía alavesa acompañado de un buen vino.

Plaza de la Virgen Blanca, Vitoria
Plaza de la Virgen Blanca, Vitoria
  • Día 3

Santo Domingo de la Calzada. Tanto había oído hablar de este pueblo, ya que es uno de los atravesados en el peregrinaje al Camino de Santiago por el camino francés, que tenía que parar a echarle un vistazo. Sin embargo, mi sorpresa fue mayor. Me encontré con un pueblo prácticamente despoblado, donde destacaban la gran cantidad de casas abandonadas y en venta. En la plaza central del pueblo se erige la catedral de Santo Domingo de la Calzada, catalogada como Bien de Interés Cultural. Una bella catedral románica, de la cual no pude visitar su interior, ya que se encontraba cerrada (otra excusa más para volver).

Elciego. Este municipio, al igual que ocurría anteriormente con Laguardia, pertenece a la provincia de Álava, pero en ella se encuentra una de las bodegas más conocidas internacionalmente, tanto por su vino como por la arquitectura de la bodega. Me refiero a la bodega de Marqués de Riscal. Esta bodega tiene anexado un hotel diseñado por el famoso arquitecto canadiense Frank O. Gehry. El arquitecto, al igual que hizo con el museo Guggenheim de Bilbao, recubrió el edificio de titanio, aunque en este caso, utilizó los colores rosa, oro y plata, característicos del Marqués de Riscal.

Vista desde los viñedos a la bodega Marqués de Riscal
Vista desde los viñedos a la bodega Marqués de Riscal

Después de estos tres días descubriendo la región, llego a la conclusión de que el mundo del vino es enorme e intervienen numerosos agentes, y que permite a esta región de España ser conocida internacionalmente. Es una zona con muy bellos paisajes y donde el silencio y la tranquilidad te acompañarán.

Al mismo tiempo, me quedo con las ganas de profundizar más e, incluso, de conocer las otras dos subregiones. Dicen que siempre hay que dejar algo pendiente para volver.

Dónde comer:

  • Briones: Los 4 arcos. Muy buena relación calidad-precio. Platos con muy buena presentación y postres caseros.
  • Vitoria: Asador “Sagartoki”. Platos deliciosos, pero de escasa cantidad. Precio algo más elevado.
  • Castañares de Rioja: Casa Palomo. Restaurante rural y modesto, con comida totalmente casera y precio asequible. Muy recomendable.

 Dónde dormir:

Tras ponerme en contacto con Toprural y explicarle las necesidades y el número de personas que viajábamos, escribí a Ángela, propietaria de la Torre Fuerte S.XIII en Baños de Rioja, un alojamiento recomendable al 100%, incluso si no reserváis toda la torre, como fue mi caso (la torre dispone de 4 habitaciones, una por planta). Habitaciones amplias y decoradas muy originalmente, todo realizado por la dueña.

Escalera de la Torre vista desde abajo
Escalera de la Torre desde abajo
Detalle de la escalera de la Torre
Detalle de la escalera de la Torre

 

 

 

 

 

 

 

 

Habitación de la Torre
Habitación de la Torre

 

 

 

 

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